Fragilidad tras la caída de Cloudflare
Fragilidad tras la caída de Cloudflare. Jorge Tsuchiya, Director Regional de NETSCOUT en México, se refirió a la reciente caída de Cloudflare y las interrupciones de internet registradas en las últimas semanas, y destacó la fragilidad tecnológica que quedó expuesta y la importancia de contar con una observabilidad real para fortalecer la resiliencia de las organizaciones.
Tras varias interrupciones importantes de internet en las últimas semanas, la caída de Cloudflare revela la relativa fragilidad de la tecnología subyacente que nos conecta.
Las redes modernas son más distribuidas, complejas y dependientes de servicios de terceros que nunca, lo que dificulta la identificación de problemas y la restauración de los servicios sin el nivel adecuado de visibilidad.
Desafortunadamente, las interrupciones pueden ocurrir, y de hecho ocurren, en todo tipo de organizaciones, incluso en los mejores proveedores del mundo, con la mejor tecnología y sistemas diseñados y construidos con tecnología de punta.
Tras una interrupción importante de la red, las organizaciones pueden detenerse, evaluar el impacto en el negocio y analizar sus propias redes para determinar cómo pueden prevenir, evitar o responder rápidamente a una situación similar. No pueden evitar que las cosas fallen en entornos de proveedores de servicios globales, pero sí pueden fortalecer la resiliencia de su propio entorno y procesos.
Las interrupciones recientes han puesto de manifiesto la necesidad de contar con procesos de preparación para incidentes que, al igual que los simulacros de incendio, requieren práctica, ensayo y perfeccionamiento regulares. Una verdadera observabilidad, que ayuda a comprender no solo qué está fallando, sino por qué y dónde, es esencial para una mayor resiliencia. Esto permite a las organizaciones saber a quién llamar y qué esperar de los proveedores para limitar el impacto de las interrupciones.